13 de octubre de 2009

VIVENCIA. Caín y otros. Pueblos que han encontrado como seguir

El pasado fin de semana me dí una vuelta por el otoño incipiente del Norte de León-Picos de Europa. Casualidades de la vida llevaron también al menos a otros tres higuereñ@s más por aquellos lugares. Además de disfrutar especialmente de los bosques ya amarilleantes de hayas, robles, serbales, hortensias, geranios y otras muchos árboles y plantas en fase otoñal, de las nubes bajas, del “orbayu o chirimiri”,de montes y valles y de algún que otro cuervo volador, hice con algun@s amig@s unos pocos kilómetros de la archiconocida “Ruta del desfiladero del Río Cares” espectacular igualmente (¡e igualmente espectacular el número de humanos que nos juntamos allí al mismo tiempo!).
Antes de llegar al comienzo de la Ruta en el pueblo de Caín, se pasa por otros (Posada de Valdeón, Cordiñanes) que hace apenas veinticinco años, vez anterior que estuve por allí, apenas contaban con unas cuantas casas bastante precarias y unos pocos vecinos. Pues bien tanto Posada como Caín (algo menos Cordiñanes, ignoro por qué) son pueblos a los que se les ve “resucitados” gracias al turismo que genera su entorno de vegetación exhuberante, pero especialmente la “Ruta del Cares”, donde centenares (si no miles, según la época) de coches repletos de gente, han dado vida a un valle que estuvo a punto de extinguirse poblacionalmente. Efectivamente casas rurales, restaurantes, bares, tiendas de recuerdos y de artilugios para ayudarse en el camino, aparcamientos, panaderías, tiendas de alimentación, queserías, farmacias, empresas de aventura y otras muchas están sacando partido a las ganas de explayarse de miles de turistas que acuden allí, asegurando con el ello el Futuro de esos pueblos.
¿A cuento de qué cuenta este tío ésto? Algunos, quizás casi todos, lo hayan adivinado ya. Higuera, ¡Cómo no! Estos pueblos han sabido finalmente explotar algo importante que estaba ahí - ¡qué fácil lo tenían dirán algunos! - consiguiendo actividad económica generadora de puestos de trabajo y … población estable. Es cierto que Higuera no lo tiene tan, supuestamente, fácil, ¡No tiene un desfiladero espectacular, ni unos montes y valles preciosos como éstos, ni …! Pero la cuestión es que en algún momento, hace años, alguién vió la manera de rentabilizar lo que tenían allí y fueron apoyados además por instituciones locales, comarcales y regionales. ¿Veremos l@s higuer@ños- y otros pueblos cercanos- alguna vez algo que pueda servirnos, aunque no necesite ser tan espectacular, ni siquiera parecerse, y conseguir también parar la bola que nos lleva hacia la Nadie?
T.Melo. 13 de octubre de 2009

P.S. Adjunto algunas fotografías que deseo no distraigan demasiado del contenido expresado aquí arriba.

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